martes, 30 de abril de 2013

Períodos de la vida.

Hay períodos en la vida que no son valorados como lo que en verdad son. Apariencias presentadas de diversas maneras no definen la naturaleza de la existencia, la esencia se pierde fácilmente a la vista de todos, ya nadie se molesta en pensar siquiera en cual es la razón de la existencia misma, la vida del todo, la razón del ser.
 
Cada uno es libre de sentir, pensar y aprender, por ello quisiera que cada uno utilice de la mejor manera sus sensaciones en favor de un bien mayor. Ya es suficiente del pensamiento negativo que nos recluye el alma al vacío infinito, es tiempo de darle significado a nuestra existencia, la de vivir procurando dejar vivir, todos con un mismo fin sin destruir el lugar donde las especies existen.
 
Si cada uno acepta que su ser existe por una finalidad entonces entenderá que todos tienen igual derecho a la vida, de forma digna y decente, porque no tiene sentido creer que la razón de la existencia sea uno mismo, sino el todo.

Código humano.

Encauzar los sentimientos personales y sociales, practicar el planteo de la autocrítica en cuanto al rol que se cumple como individuo en una comunidad de patriotas que buscan estrechar lazos apelando al sentido común, debería ser un ejercicio diario necesario para favorecer la libertad de expresión y de derechos humanos. Hacer a un lado el egoísmo y priorizar la solidaridad y la protección de los ciudadanos. Acariciar tanto con la palabra como con la coherencia y el respeto, el rostro de la humanidad y de la vida digna sintiéndose respaldado y cuidado y no prisionero de la barbarie.

lunes, 29 de abril de 2013

El espíritu rancio.

Uniformes antipatriotas pululando por los edificios públicos a traición. Enceguecidos por el deseo de poder de intereses económicos de turno, son el reflejo del despecho y la barbarie oculta tras las máscaras de pulcritud y la bandera nefasta de los impunes que repiten errores de generaciones que se impusieron a los ciudadanos honorables, juiciosos y respetables ante el reclamo de derechos básicos no escuchados (sordera conveniente) de quienes pisan cabezas y arremeten sin remordimiento en pos de caprichos, fuerza bruta y vanidad latente en quienes odian la vida.

domingo, 28 de abril de 2013

El comienzo de la palabra.

He tomado la decisión de ejercer el derecho muy desestimado del pensamiento libre y propio. Este espacio existe para expresar el pensamiento, las emociones, los ideales, y toda muestra de libertad y dignidad, con modestia y humildad, con honestidad sincera y aprecio por la vida tal como nuestra naturaleza lo merece.